Las nuevas invenciones son el motor que hace progresar los diferentes sectores económicos. En el mundo agrícola, la obtención de nuevas variedades vegetales es uno de los elementos que más ha contribuido al incremento de la productividad.
Para conseguir una dinámica adecuada para la obtención de nuevas variedades vegetales, es necesario generar incentivos, para que los diferentes actores involucrados en el sector obtentor, inviertan tiempo y recursos en tal actividad de mejora varietal.
En este sentido, el sistema que ha demostrado ser más eficaz y eficiente para ello, es aquél basado en los llamados «derechos de propiedad intelectual«. A través de dicho sistema, al inventor que crea una novedad que genera riqueza, se le otorga durante un periodo de tiempo limitado los derechos exclusivos para su explotación, de forma que se le permita recuperar la inversión acometida y tener unas expectativas de obtener un justo beneficio por su labor inventiva.